Editorial 7 PDF
Escrito por Pedro Meyer   

 

Acabábamos de grabar un esbozo de la banda sonora. Lo hicimos para evaluar el tiempo que tomaría la narración de la historia que iría acompañando a las fotos en el CD-ROM "Fotografío Para Recordar".

 

Emocionalmente estaba deshecho, después de todo era contar la historia de los últimos años de vida de mis padres. La sala de nuestra casa era el estudio de grabación. Volver a hacer la grabación en un estudio profesional era algo imposible para mí. Y por esa razón la versión final fue la que originalmente se grabó en la sala de mi casa.

 

El hecho de que el espectador escuchara esa grabación, "con todas sus imperfecciones", en el CD-ROM, le daba una calidad de realismo e integridad que fue ampliamente reconocido. Mi falta de capacidad de poder hacer la grabación por segunda vez fue una verdadera bendición.

 

Encontré que tener el sonido -mi voz- al lado de las imágenes contribuyó en un nivel de información muy importante, la cual se hubiera perdido en una edición impresa. No quiero decir "perdido" en el sentido obvio de que no estaba, sino en el sentido del impacto emocional que produjo al espectador el escuchar mi voz y al mismo tiempo ver las imágenes. En el pasado, el sonido nunca fue un elemento de preocupacíon para los fotógrafos. Estábamos entrenados a ver, no a escuchar. Nuestro foro de expresión, como el de las películas mudas, era un espacio sin sonido. Imágenes en papel o impresiones en una pared.

 

Todo esto cambió para siempre con la llegada de la tecnología del CD-ROM, que hizo posible la publicación del audio conjuntamente con imágenes."Fotografío Para Recordar", publicado por Voyager, se convirtió en el primer CD-ROM publicado que tenía sonido e ímágenes, ambas digitales.

 

Ahora los fotógrafos pueden crear bandas de sonido sin mayores complicaciones técnicas. Se pueden producir en computadoras personales a un mínimo costo.

 

Durante el último año se ha desarrollado en el Internet la posibilidad de transmitir sonido con mayor calidad. Esto nos ha convencido de que debemos estar involucrados en este esfuerzo aquí en ZoneZero. Pensamos que ha llegado el momento en que los fotógrafos explorarán cada vez más la oportunidad que ofrece tener sonido a la par de las imágenes.

 

Creemos que en un futuro las fotografías se verán ya sea "mudas", o bien, "hablando", como en el cine. Ahora existe la tecnología que nos ofrece esa posibilidad a un costo de producción relativamente bajo.

 

Sentimos que desde la perspectiva técnica habrá una convergencia de opciones en la fotografía y el video digital, ambas teniendo acceso a bandas sonoras. Y con el tiempo este desarrollo será tan importante como lo fue la cámara de formato de 35 mm en su época.

 

Con esta línea de interés hacia el uso del sonido, alentamos a Muriel Hasbun a desarrollar su trabajo, el cual ahora presentamos en ZoneZero. Le pedimos que grabara una narración que acompañara su historia personal. Pensamos que ha creado algo muy importante, aparte de sus méritos artísticos, probablemente es uno de los primeros trabajos, de este tipo, que aparecen en Internet.

 

Con este ejemplo, queremos entusiasmar a otros a continuar en esta dirección, ya que creemos que esta apertura provee a la fotografía de un nuevo potencial narrativo.

 

Con el transcurrir del tiempo, cada vez más la tecnología nos proveerá con sistemas más sofisticados y fluidos de transmisión. Pero la esencia será la misma. La imagen fija y el sonido han convergido finalmente en un medio transportable.

 

 

Pedro Meyer
Junio 1997

Liliana Nieto

 

Le damos la bienvenida a Liliana Nieto del Rio, quien ha venido aquí a colaborar con el equipo de ZoneZero,
prestándonos una invaluable ayuda para hacer posibles estas páginas.


 

 

 
Enviar a
|
Más